martes, 12 de octubre de 2010

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De un momento a otro mis ojos se han abierto más de lo habitual, mi estado de calma a desesperado, ha sentido tu presencia desde la cuadra anterior. Antes que tú ingreses, a mi lado ya tengo tu perfume que me acaricia, llegas, me abrazas y siento mi cuerpo deshacerse y derramarse entre tus dedos; porque entre tus manos me siento fina y vulnerable, sólo tú puedes quebrar todas mis barreras...con tu sonrisa de niño travieso y juguetón, ese que me besa de la manera más inocente y a la vez más agresiva.

Mis impulsos en general van para ti, mi par perfecto; Mis ganas de que me dominen y me aten, luego me suelten y volver a ser libre...todo es sobre ti, ahora mis sueños y pensamientos. Pero nada para mi debe ser perfecto me dijo el espíritu mientras tú cerrabas los ojos y decías: dame mi beso. Yo no puedo tenerte por un espacio mayor de 5 min y tú tampoco puedes pasar un periodo mayor.

Lo peor no es que me pase o no este tipo de cosas (porque ya me pasó), la cuestión es que llegue a confundir lo bien que la pasamos encerrados en nuestro mundo paralelo y luego no quiera dejarte ir (también me pasó).

Talvéz sea momento de dejarte libre para no empezar a quererte y hacerme la fuerte, Sí, muy fuerte...por fuera.

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